Ambientalistas se oponen a Celulosas en Uruguay

Para entender la verdadera dimensión del conflicto que enfrenta a estas dos ciudades Gualeguaychú (Arg) y Fray Bentos (Uru), unidas por un moderno puente y a estos dos países, es que me decidí a estudiar el problema y poder plantéarselos a todos ustedes.
En un día normal, miles de autos y camiones utilizan un puente para cruzar el río Uruguay y transitar la llamada ruta del Mercosur.
Pero estos días están lejos de ser normales. Lo único que se escucha en el puente es el sonido del viento. Hace varios días que por aquí no pasa nadie. Eso se debe al corte de ruta que vienen imponiendo los ambientalistas y ciudadanos de Gualeguaychú, en protesta contra la papeleras de capitales extranjeros que se están construyendo sobre la margen uruguaya del río Uruguay.
El conflicto ha derivado en un enfrentamiento político y diplomático que amenaza terminar en el Tribunal Internacional de La Haya.
Inversión millonaria:
En un día normal, miles de autos y camiones utilizan un puente para cruzar el río Uruguay y transitar la llamada ruta del Mercosur.
Pero estos días están lejos de ser normales. Lo único que se escucha en el puente es el sonido del viento. Hace varios días que por aquí no pasa nadie. Eso se debe al corte de ruta que vienen imponiendo los ambientalistas y ciudadanos de Gualeguaychú, en protesta contra la papeleras de capitales extranjeros que se están construyendo sobre la margen uruguaya del río Uruguay.
El conflicto ha derivado en un enfrentamiento político y diplomático que amenaza terminar en el Tribunal Internacional de La Haya.
Inversión millonaria:
"Es la inversión más grande en la historia de Uruguay. Una inversión directa, que entre las dos plantas, es de alrededor de US$1.800 millones", señaló Omar Lafluf, intendente del Departamento de Río Negro, con sede en Fray Bentos.
Del lado argentino creen que las plantas contaminarán el río Uruguay y perjudicarán las industrias de la zona.
"Tenemos pruebas fehacientes de que esto (las fábricas) nos va a perjudicar, fundamentalmente en tres cosas: en la salud, en nuestro desarrollo económico y en nuestro futuro en cuanto ciudad turística y agrícola", dijo Daniel Irigoyen, intendente de Gualeguaychú.
Omar Lafluf no dice que no habrá contaminación, pero aclara que "el impacto que va a haber, con la tecnología que se va a usar y con los controles que van a tener estas plantas, será absolutamente menor".
La tecnología:
Del lado argentino creen que las plantas contaminarán el río Uruguay y perjudicarán las industrias de la zona.
"Tenemos pruebas fehacientes de que esto (las fábricas) nos va a perjudicar, fundamentalmente en tres cosas: en la salud, en nuestro desarrollo económico y en nuestro futuro en cuanto ciudad turística y agrícola", dijo Daniel Irigoyen, intendente de Gualeguaychú.
Omar Lafluf no dice que no habrá contaminación, pero aclara que "el impacto que va a haber, con la tecnología que se va a usar y con los controles que van a tener estas plantas, será absolutamente menor".
La tecnología:
Para producir celulosa apta para hacer un papel de color blanco, la pasta química debe ser blanqueada.
"Estas fábricas van a contaminar por varios motivos, pero el principal es por el uso del cloro en forma de dióxido de cloro en el proceso de blanqueo de la pasta celulósica", explicó Paula Brufman, coordinadora de la Campaña Contra la Contaminación en el Cono Sur, del grupo ambientalista Greenpeace.
Las compañías Botnia, finlandesa, y Ence, española, utilizarán una tecnología llamada Libre de Cloro Elemental, o ECF, que, si bien no utiliza gas cloro o cloro elemental, sí utiliza compuestos de cloro.
"Estas fábricas van a contaminar por varios motivos, pero el principal es por el uso del cloro en forma de dióxido de cloro en el proceso de blanqueo de la pasta celulósica", explicó Paula Brufman, coordinadora de la Campaña Contra la Contaminación en el Cono Sur, del grupo ambientalista Greenpeace.
Las compañías Botnia, finlandesa, y Ence, española, utilizarán una tecnología llamada Libre de Cloro Elemental, o ECF, que, si bien no utiliza gas cloro o cloro elemental, sí utiliza compuestos de cloro.
Una de las exigencias de Greenpeace es que las empresas utilicen la tecnología conocida como Totalmente Libre de Cloro, o TCF, que no utiliza compuestos de cloro.
"Esta fábrica no va a contaminar. Va a estar dentro de los parámetros más exigentes de la industria a nivel mundial", aseguró Bruno Vuan, uno de los voceros de la papelera finlandesa Botnia.
Según Vuan, "el consenso científico, expresado a través del Convenio de Estocolmo y a través de la normativa de la Comunidad Europea, dice que el impacto ambiental de las plantas ECF y TCF es equivalente".
Los gobiernos:
A nivel de los gobiernos nacionales, las discrepancias son tan fuertes como entre las empresas y los grupos ambientalistas.
"Esta fábrica no va a contaminar. Va a estar dentro de los parámetros más exigentes de la industria a nivel mundial", aseguró Bruno Vuan, uno de los voceros de la papelera finlandesa Botnia.
Según Vuan, "el consenso científico, expresado a través del Convenio de Estocolmo y a través de la normativa de la Comunidad Europea, dice que el impacto ambiental de las plantas ECF y TCF es equivalente".
Los gobiernos:
A nivel de los gobiernos nacionales, las discrepancias son tan fuertes como entre las empresas y los grupos ambientalistas.
Una comisión binacional se reunió durante 180 días para evaluar el impacto ambiental de las papeleras y, luego de varias idas y vueltas, concluyó era imposible elaborar un informe conjunto.
Argentina quiere que se suspenda la construcción de las fábricas hasta tanto no se realice un estudio imparcial e independiente sobre el impacto ambiental de las mismas.
Uruguay insiste que los estudios realizados indican que el medio ambiente no corre peligro, y se queja de los cortes de ruta del lado argentino.
Todo parece indicar, al menos por ahora, que el tema terminará en manos del Tribunal Internacional de La Haya.
Mientras tanto, la construcción de las fábricas sigue en marcha, y en el puente que une Gualeguaychú con Fray Bentos, sólo se escucha el ruido del viento.
Argentina quiere que se suspenda la construcción de las fábricas hasta tanto no se realice un estudio imparcial e independiente sobre el impacto ambiental de las mismas.
Uruguay insiste que los estudios realizados indican que el medio ambiente no corre peligro, y se queja de los cortes de ruta del lado argentino.
Todo parece indicar, al menos por ahora, que el tema terminará en manos del Tribunal Internacional de La Haya.
Mientras tanto, la construcción de las fábricas sigue en marcha, y en el puente que une Gualeguaychú con Fray Bentos, sólo se escucha el ruido del viento.